Visto desde Moscú, el Ártico no es tanto un espacio frágil a preservar del calentamiento global sino una reserva rebosante de materias primas y oportunidades comerciales. La explotación de petróleo, gas y minerales es una prioridad estratégica para Rusia.
PUBLICIDADRusia aumenta la presencia de rompehielos en el Ártico.
Visto desde Moscú, el Ártico no es tanto un espacio frágil a preservar del calentamiento global sino una reserva rebosante de materias primas y oportunidades comerciales.
La explotación de petróleo, gas y minerales es una prioridad estratégica para Rusia.
En este vídeo pueden ver al rompehielos nuclear 50 Años de Victoria navegando hacia el Polo Norte.
El hielo que se encuentra es cadavez más escaso y débil.
En la experiencia del capitán del rompehielos Dimitry Lobusov: "En los años 90 y a principios de 2000, el hielo era mucho más duro, más grueso, se mantenía durante muchos años. Ahora prácticamente no encontramos ese tipo de hielo. La humedad ha aumentado, sí. Nosotros, como navegantes, observamos la actividad de los ciclones. Comenzaron a moverse de manera diferente. Hoy mismo lo recordábamos: sencillamente era imposible llegar al Polo en verano sin gafas de sol. El sol brillaba. Ahora creo que ni siquiera se ve el sol".
La Ruta Marítima Septentrional conecta el Océano Pacífico con el Atlántico a través de las aguas rusas del Ártico. La rentabilidad de esta Ruta abierta por el calentamiento global está en competir con el Canal de Suez.
Dependerá de si simplifica el envío de hidrocarburos al Sudeste Asiático al unir los océanos Atlántico, Pacífico y Ártico. La ruta entre Asia Oriental y Europa es considerablemente más corta que la que pasa por el Canal de Suez.
Sergey Kondratyev, experto del Instituto de Energía y Finanzas, asegura que_"La ventaja clave de Rusia no es sólo la presencia de una flota de rompehielos, sino también la de la propia Ruta Marítima del Norte; porque tenemos la Ruta Marítima del Norte con una infraestructura suficientemente desarrollada. Es económicamente eficiente, puede ser demandada en el mundo para el transporte marítimo civil".
Antes sólo era navegable en verano, pero con la progresiva disminución de la capa de hielo, Moscú estima que será navegable durante todo el año a partir de 2030.
Los grupos ecologistas denuncian una carrera por los hidrocarburos, algo que ha provocado varias catástrofes ecológicas, así como el aumento de la presencia de reactores atómicos navegando por el Ártico.
De momento, es imposible navegar por ella sin rompehielos. Sólo en verano está abierta a algunos buques especializados. Las empresas estatales rusas, como Gazpromneft, Norilsk Nickel y Rosneft, ya tienen importantes proyectos en el Ártico para la extracción de petróleo, gas y minerales.