David Julius y Ardem Patapoutian reciben el premio Nobel de Medicina por identificar los sensores que permiten sentir el dolor, la temperatura. Un estudio pionero que abre la puerta al desarrollo de nuevas vías terapéuticas para controlar el dolor crónico asociado al trauma y a diversas enfermedades
PUBLICIDADDavid Julius y Ardem Patapoutian reciben el premio Nobel de Medicina por identificar los sensores que permiten sentir el dolor, la temperatura. Un estudio pionero que abre la puerta al desarrollo de nuevas vías terapéuticas para controlar el dolor crónico asociado al trauma y a diversas enfermedades.
La temperatura, el dolor y la presión forman parte de nuestro sentido del tacto, quizás el menos comprendido de los cinco sentidos humanos. Julius y Patapoutian han desvelado las bases moleculares y neuronales para las sensaciones térmicas y mecánicas.
Sus "descubrimientos pioneros" han "permitido comprender cómo el calor, el frío y la fuerza mecánica pueden iniciar los impulsos nerviosos que nos permiten percibir el mundo y adaptarnos a él", dijo el jurado del Nobel en Estocolmo.
David Julius, de 65 años y profesor de la Universidad de California, utilizó la capsaicina, un componente activo de las guindillas que provoca una sensación de ardor, para identificar un sensor en las terminaciones nerviosas de la piel que responde al calor.
Doce años más joven que él, Ardem Patapoutian, un profesor nacido en Beirut que trabaja en Scripps Research (California), utilizó células sensibles a la presión para descubrir una nueva clase de sensores que responden a estímulos mecánicos en la piel y los órganos internos.
La Academia ha publicado una entrañable foto del doctor Patapoutian viendo el fallo junto a su hijo Luca.
"En nuestra vida cotidiana damos por sentado nuestros sentidos, pero ¿cómo se desencadenan los impulsos nerviosos para que se perciban la temperatura y la presión? Esta es la cuestión que han resuelto los premios Nobel de este año", resumió el jurado.
Este premio ha frustrado las predicciones de los expertos, que apostaban por las vacunas de ARN mensajero, los expertos en adhesión celular, las nuevas vías para los tratamientos de reumatología, los campeones de la epigenética o la resistencia a los antibióticos como posibles ganadores del 120º aniversario de los premios.
La Academia Sueca de las Ciencias guarda celosamente el secreto y a menudo sorprende con sus elecciones. El año pasado, ya en plena pandemia, el premio 2020 fue para tres descubridores del virus responsable de la temida hepatitis C.
El Nobel de Medicina abre la temporada de Premios Nobel. El viernes se conocerá el ganador del polémico y prestigioso Nobel de la Paz.