Más de 3 millones de personas han huído de la invasión rusa de Ucrania cuando se cumplen 25 días de guerra con bombardeos en varias ciudades.
En la localidad italiana de Belmonte in Sabina, a una hora y media de Roma, Tania, una refugiada ucraniana, madre de un bebé de pocos meses ha conseguido paz y un refugio seguro. Tania ha dejado atrás a su marido y su vida de antes. Junto con otra amiga ucraniana, decidió dar prioridad a la seguridad de los hijos.
"A los seis días de que el presidente Vladímir Putin empezara esta guerra decidimos dejar nuestra patria porque teníamos miedo, no por nosotras, sino por los niños, por su futuro... En pocos días nos quedam os sin electricidad, ni agua, ni gas. ¿Cómo explicárselo a los niños? Porque ellos estaban acostumbrados a estar siempre bien. No fue fácil dejarlo todo y emprender este viaje", cuenta Tania, joven madre refugiada ucraniana.
Katia es otra refugiada ucraniana que ha encontrado aquí un hogar. Junto a Tania, y con los niños pequeños, cruzaron la frontera con Hungría. Se han instalado aquí gracias a Halyna y otras conexiones con la diáspora ucraniana.
"Creemos que en el futuro podremos volver a casa y reconstruir una nueva vida, remontaremos la situación económica, reconstruiremos el país, y viviremos en paz como antes."
Unos 58.000 ucranianos, entre ellos 22.000 menores, han encontrado refugio Italia desde que comenzó la invasión rusa de Ucrania.