La Duma, o cámara baja, ha aprobado un paquete legislativo que autoriza al Gobierno ruso a no cumplir con las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Creado en 1958 por el Consejo de Europa, fue el último recurso para muchos ciudadanos rusos cuyos derechos humanos fueron vulnerados.
Rusia da un paso más en su alejamiento de las instituciones internacionales creadas después de la Segunda Guerra Mundial. Ahora, la Duma, o cámara baja, ha aprobado un paquete legislativo que autoriza al Gobierno ruso a no cumplir con las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Creado en 1958 por el Consejo de Europa (que no debe confundirse con el Consejo Europeo, una institución de la UE), el Tribunal con sede en Estrasburgo, fue el último recurso de muchos ciudadanos rusos frente a sentencias que consideraban injustas, en las que se vulneraban sus derechos humanos.
Rusia fue expulsada del Consejo de Europa el 16 de marzo en respuesta a la invasión de Ucrania. Según el presidente de la Duma estatal, Vyacheslav Volodin, este Tribunal fue una "herramienta occidental" para atacar los valores y tradiciones de Rusia, y citó un fallo que exige que Rusia reconozca el matrimonio entre personas del mismo sexo, prohibido hace dos años tras unas enmiendas constitucionales.