Sin agua, sin electricidad... La nueva estrategia del Kremlin de bombardeos masivos contra las infraestructuras energéticas, ha sumido un poco más en la miseria a buena parte del pueblo ucraniano.
PUBLICIDADSin agua, sin electricidad... La nueva estrategia del Kremlin de bombardeos masivos contra las infraestructuras energéticas, ha sumido un poco más en la miseria a buena parte del pueblo ucraniano.
Los más afectados son los que viven en zonas devastadas, como en Kupianks. Pero el invierno acecha a todos por igual.
Todo empeora rápidamente, explica el portavoz de los servicios de emergencia de Ucrania Oleksandr Khorunzhyi: "La situación es crítica. Los bombardeos rusos han dejado sin suministro eléctrico a 1.162 asentamientos, incluidas algunas localidades de los territorios ocupados".
Por primera vez en varias semanas , Rusia afirma haber logrado avances en la región de Járkov, donde sus fuerzas habrían recuperado el control de una localidad que abandonaron a principios de septiembre.
La nueva oleada de ataques rusos ha destruido en ocho días el 30% de las centrales eléctricas de Ucrania y creado una situación crítica en el país, en lo que Kiev considera una brutal estrategia del Kremlin para "congelar" a los ucranianos de cara al invierno.
El papel que juegan los drones suicidas de fabricación iraní, que también han atacado edificios residenciales, es fundamental para la estrategia rusa.
Estos drones vuelan en enjambres a muy baja altura, lo que los hace muy difíciles de derribar.
El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania Dmitro Kuleba ha propuesto al presidente Volodímir Zelenski interrumpir las relaciones diplomáticas con Irán por su "complicidad en los crímenes de agresión rusos".
Rusia niega haber utilizado estos drones e Irán niega haberlos suministrado.
Sin embargo han sido filmados en repetidas ocasiones, recuperados los restos de los que han caído y los expertos no tienen dudas con respecto a su origen.