La cumbre, que ha congregado a los líderes socialistas de Europa, concluyó en Málaga con Stefan Löfven reelegido como su líder y con incertidumbres tras la renuncia de Costa en Portugal y las críticas a Sánchez por sus pactos con los independentistas.
El Partido Socialista Europeo ha finalizado su congreso en Málaga en medio de una situación general que no es precisamente favorable para los socialdemócratas en la UE.
El PSE ha reelegido como su presidente al ex primer ministro sueco Stefan Löfven, que liderará al grupo en las elecciones europeas del próximo junio. Sin embargo, el partido continental aún no ha anunciado a sus candidatos: los aspirantes presentarán sus candidaturas desde el lunes (13 de noviembre) hasta el 17 de enero.
Durante la cumbre, el PSE ha dado la bienvenida a un nuevos miembros de Hungría, Kosovo, Bielorrusa y Serbia.
Los congresistas aplaudieron la probable investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobiernotras el acuerdo de amnistía con los separatistas catalanes. Sin embargo, las posiciones sobre la guerra en Gaza no fueron tan unánimes entre los socialistas. Mientras Sánchezinstaba por un alto el fuego, el canciller alemán Olaf Scholz, lideraba a los que optan por pausas humanitarias, no por un alto el fuego total.
Los preparativos de los socialistas europeos para la campaña parlamentaria de la UE se han visto empañados por las fuertes críticas hacia el anfitrión del Congreso, Pedro Sánchez, por su pacto con los separatistas catalanes para mantenerse en el Gobierno de España y por la dimisión del primer ministro portugués,Antonio Costa, tras verse envuelto en la investigación de un caso de corrupción.