Tel Aviv, Jerusalén, Teherán, Dublín y París: los manfiestantes exigen paz, el alto el fuego en Gaza y la devolución de los rehenes.
PUBLICIDADLas manifestaciones en respuesta a la guerra entre Israel y Hamás continúan en todo el mundo.
Israel
La marcha de cinco días hacia Jerusalén iniciada por familiares de rehenes retenidos por militantes palestinos en Gaza llegó a su destino el sábado por la noche. La marcha partió de Tel Aviv el martes y culminó en la residencia del primer ministro Benjamin Netanyahu. La gente exige al gobierno israelí que haga todo lo que esté en su mano para traer a casa a los cautivos.
En el centro de Tel Aviv decenas de manifestantes se congregaron para exigir el fin de la guerra de Israel con Hamás y un alto el fuego para devolver a los rehenes. La protesta fue aprobada por las autoridades israelíes en el último momento y se celebró en sábado, cuando muchos judíos religiosos observan un día de silencio.
Irán
Miles de iraníes salieron a la calle en Teherán el sábado en el marco de marchas patrocinadas por el Estado para manifestarse contra la guerra. Reuters informa de que la televisión estatal iraní muestra a manifestantes portando bolsas de cadáveres simuladas para simbolizar a los niños muertos por los ataques israelíes en Gaza antes del Día Mundial del Niño, que se celebra el lunes.
Irlanda
Los manifestantes salieron a la calle en Dublín por sexto sábado consecutivo, pidiendo un alto el fuego inmediato en Gaza y que el gobierno irlandés imponga sanciones más duras a Israel.
Los manifestantes también salieron a la calle el sábado en otras ciudades europeas, a medida que aumenta la indignación de la opinión pública mundial por el trato que Israel dispensa a los gazatíes.
Francia
Unos miles de personas se reunieron en París para exigir el alto el fuego. Esta manifestación fue organizada por grupos propalestinos y partidos de izquierda
Los supervivientes de las atrocidades nazis se unieron el sábado a jóvenes activistas judíos ante el monumento al Holocausto de París para condenar el resurgimiento de los discursos de odio antisemita, las pintadas y los insultos relacionados con la guerra entre Israel y Hamás.