El TJUE cree que la Comisión Europea se equivocó al invocar un principio de competencia que no está recogido en el derecho tributario luxemburgués y al usar unas directrices de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que tampoco figuran en su ordenamiento nacional.
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) avaló este jueves las ayudas fiscales concedidas por Luxemburgo a Amazon, por lo que el gigante tecnológico no tendrá que devolver 250 millones de euros como le reclamó la Comisión Europea (CE) tras considerarlas ilegales.
En una sentencia emitida este jueves, el alto tribunal comunitario confirmó que, como ya había determinado el Tribunal General (TGUE), la decisión inicial de la Comisión de obligar a Luxemburgo a recuperar las ayudas concedidas a Amazon debía anularse, aunque lo hace por criterios diferentes.
"La Comisión no demostró que el 'tax ruling' (esquema fiscal) concedido a Amazon por Luxemburgo fuera una ayuda de Estado incompatible con el mercado interior", señaló el TJUE en un comunicado.
Ventajas fiscales contrarias a las leyes europeas
En 2017, Bruselas consideró que las ventajas fiscales por valor de unos 250 millones de euros de las que se había beneficiado Amazon en Luxemburgo eran contrarias a la legislación comunitaria porque, a su juicio, el gigante del comercio electrónico había podido pagar durante varios años "bastante menos" impuestos "sin una justificación aparente".
En particular, Bruselas alegó que la compañía pudo beneficiarse de un 'tax ruling' durante ocho años (desde 2006 hasta 2014) que le permitió ahorrarse el pago de impuestos sobre "casi tres cuartos de los beneficios" obtenidos a través de sus ventas en la UE.
Tanto Amazon como el Gobierno luxemburgués recurrieron inicialmente al Tribunal General de la UE, quien les dio la razón al considerar que la Comisión Europea no había demostrado que estas ayudas fiscales fuesen selectivas.
Un error
Las autoridades de competencia comunitarias acudieron entonces al Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que hoy desestimó su recurso y confirmó que el Ejecutivo comunitario erró en su evaluación, pero por un motivo diferente.
Frente al criterio del tribunal de primera estancia, que evaluó si las ventajas fiscales se efectuaron respetando las condiciones del mercado, el TJUE cree que la Comisión se equivocó al invocar un principio de competencia que no está recogido en el derecho tributario luxemburgués y al usar unas directrices de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que tampoco figuran en su ordenamiento nacional.
Para la experta en fiscalidad europea de Oxfam Chiara Putaturo, la sentencia es "un regalo de Navidad temprano" para Amazon y permitirá a la multinacional seguir evitando "una factura fiscal que ya tiene una década", por lo que instó a la Unión Europea a avanzar en reformas que impidan las prácticas de "los paraísos fiscales dentro de sus propias fronteras".
"Cuando los países permiten a las multinacionales escapar sus obligaciones fiscales, se alinean con los dueños adinerados de las empresas y nos dejan al resto con la cuenta sin pagar", advirtió la experta en declaraciones a la Agencia EFE.