La cantidad es inferior a los 10 100 millones de euros solicitados por las Naciones Unidas para sus necesidades humanitarias.
PUBLICIDADLos donantes se han comprometido en Bruselas a aportar 9600 millones de euros (10 300 millones de dólares) en subvenciones y préstamos para ayudar a la población siria dentro y fuera del país.
El dinero comprometido en la VII Conferencia de Bruselas: "Apoyar el futuro de Siria y de la región", celebrada el jueves en la capital belga, está destinado a ayudar a los 15 millones de personas que viven en el interior de una Siria devastada por la guerra, así como a los países vecinos que acogen a refugiados sirios, que a su vez se encuentran en una situación económica desesperada. La cantidad se acerca a lo solicitado por la ONU, pero faltan unos 500 millones de euros.
La Subsecretaria General de la ONU, Ulrika Modéer, ha afirmado que la situación en Siria y los países vecinos afecta a todo el planeta. "Un 10 % de cobertura en lo que respecta a estas necesidades es sencillamente insuficiente. Esta es una crisis que afecta realmente, por supuesto, a las personas afectadas, pero también a todos los países vecinos y al resto del mundo", ha apuntado Modéer en una entrevista con Euronews.
"Tenemos que apoyar la capacidad de recuperación de las comunidades, los servicios básicos, la economía local de forma que la gente pueda mantener su agencia".
El dinero donado por la comunidad internacional ha ascendido a 4600 millones de euros para 2023 y 1000 millones para 2024 y años posteriores. La UE ha prometido 3800 millones de euros en subvenciones, 2100 millones de la Comisión Europea y 1700 millones de los Estados miembros. El resto corresponde a préstamos de instituciones financieras internacionales y donantes que han prometido 4000 millones de euros.
El terremoto que asoló Turquía y Siria el pasado febrero ha agravado la crisis y las ONG locales que están en primera línea dicen que no dan abasto. Euronews ha hablado con una de ellas, que opera en la zona noroccidental controlada por los rebeldes, con 1200 voluntarios que intentan ayudar a jóvenes y mujeres.
También gestionan dos maternidades y dos hospitales de atención primaria. "Necesitamos una financiación flexible que podamos movilizar y utilizar inmediatamente cuando se produzcan catástrofes. Tenemos que mantener nuestra capacidad de respuesta ante las emergencias", ha explicado a Euronews Hisham Dirani, director general de la ONG Violet Organisation.
"La situación de seguridad, como las operaciones militares inesperadas, es algo que hace la vida cada vez más difícil y tenemos que tomar muchas medidas".
De los 6,8 millones de sirios que abandonaron el país, unos cinco millones no están lejos de casa. Turquía acogió a más de tres millones de refugiados, y el resto está repartido principalmente por Líbano, Jordania, Irak y Egipto. Pero los dirigentes de estos países hablan cada vez más de devolverlos a casa.
Uno de los argumentos es que no hay perspectivas de una alternativa política viable al régimen, sobre todo desde que la Liga Árabe readmitió al presidente Assad a principios de mayo, tras ser expulsado cuando comenzó la guerra civil en 2011.
Si los países vecinos de Siria pasan de las palabras a los hechos y comienzan a repatriar a los refugiados que acogen desde hace más de una década, podrían producirse cambios en los flujos migratorios. En lugar de volver a casa, los refugiados podrían buscar otro refugio seguro y Europa es un destino probable.