8 jul - El Ibex-35 cedió terreno el viernes y concluyó la semana con un descenso acumulado de casi el 1%, en un contexto de temores a una recesión global y al impacto del endurecimiento monetario en las grandes economías.
La jornada estuvo marcada por el informe laboral de Estados Unidos, que mostró una creación de puestos de trabajo superior a lo previsto, lo que a ojos de muchos inversores contribuirá a reforzar el ciclo de subidas de interés de la Reserva Federal para frenar la inflación, ya que la solidez de los empleos suele impulsar al alza los precios.
Tras conocerse estos datos, los futuros del mercado apuntaban a más de un 90% de posibilidades de una subida de 75 puntos básicos en los tipos de interés de Estados Unidos este mes, con un incremento acumulado de 187 puntos para el final del año.
A todo ello se sumaba la ausencia de señales de desescalada bélica entre Rusia y Ucrania, un conflicto que ha agravado de manera notable las crisis postpandémicas de las cadenas de suministro y de la energía.
Ante este contexto, el selectivo bursátil español Ibex-35 cerró con una caída de 22,20 puntos el viernes, un 0,27%, hasta 8.100,30 puntos, mientras que el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 subió un 0,40%.
En el conjunto de la semana, el Ibex-35 mostró un descenso del 0,93%, en lo que supone su segunda caída semanal consecutiva.
En el sector bancario, Santander perdió un 0,10%, BBVA se anotó un 0,79%, Caixabank cedió un 0,60%, Sabadell cayó un 0,32%, y Bankinter se dejó un 1,26%.
Entre los grandes valores no financieros, Telefónica retrocedió un 0,08%, Inditex avanzó un 0,78%, Iberdrola se dejó un 1,57%, Cellnex ganó un 0,52% y la petrolera Repsol perdió un 1,22%.