Desde las cautivadoras costas, hasta las exuberantes tierras del interior y los maravillosos cursos de agua... Angola se está dando cuenta de su gran potencial turístico.
PUBLICIDADDesde hace más de un año, el equipo de reporteros de Euronews asiste al descubrimiento de Angola. Los periodistas están disfrutando de experiencias enriquecedoras, encuentros excepcionales y paisajes absolutamente maravillosos.
Desde las cautivadoras costas, hasta las exuberantes tierras del interior y los maravillosos cursos de agua... Angola se está dando cuenta de su gran potencial turístico. La primera parte del viaje del equipo periodístico tiene como destino el inmenso desierto del Namib, en el suroeste del país.
La siguiente escala es hacia el interior, para explorar la provincia de Cuando Cubango, rica en espacios naturales. Sus ríos alimentan el mundialmente famoso delta del Okavango.
El desierto del Namib se extiende desde Angola, pasando por Namibia, hasta el Kalahari sudafricano. Se trata de una impresionante proeza de la naturaleza.
En la parte desértica angoleña, es posible conocer a las tribus locales. Y para alojarse, al viajero le esperan los ecoalojamientos y los cámpines de lujo, o también llamados ‘glámpines’.
Si el viajero se adentra en el interior, encontrará algo único: 'tierras fértiles, ríos y fauna'. Los ríos de Cuando Cubango desembocan en el delta del Okavango, uno de los últimos humedales de la Tierra. El equipo del Proyecto Okavango Wilderness de National Geographic pasó varios años construyendo un mapa científico de los humedales. Para los conservacionistas, Cuando Cubango es especial.
"Creo que he encontrado el lugar donde quiero quedarme el resto de mi vida. Es un lugar muy tranquilo y veo mucho potencial en esta zona para el turismo", afirma el conservacionista Stefan van Wyk.
El viaje continúa con dirección hacia la costa, en una emocionante aventura en vehículos todoterreno. Los apasionados al mundo de las 'dos ruedas' pueden disfrutar de unos paisajes de ensueño, con un grupo de moteros, antes de terminar su aventura en Lobito, en un tren muy especial.
Angola es un país hecho para los vehículos todoterreno, que permiten al viajero llegar a lugares muy ‘especiales’, a los que, de otro modo, no podría acceder. Quienes participan en el viaje cerca, ponen fin a su camino en el lugar en el que las aguas del río Onzo casi se encuentran con las del océano.
"A quien le guste la naturaleza, viajar por caminos no convencionales... Angola es un país ideal, excelente en todos los aspectos", afirma Alfredo Oliveira, organizador del viaje en vehículos todoterreno.
Explorar el territorio sobre dos ruedas también es una forma estupenda de descubrir Angola. De esta manera, cabe la posibilidad de detenerse en lugares impresionantes, como el Mirador de la Luna.
"Es un país que tiene una costa inmensa, es un país acogedor. Angola es, de hecho, una potencia, un secreto escondido dentro del turismo regional africano", señala Jorge Custódio de Almeida, presidente de la Asamblea General de Amigos da Picada.
Después de varias horas en moto, al viajero le espera una noche en un alojamiento de lujo. El Mubanga ofrece un hermoso ‘refugio rural’ y un gran ambiente por la noche.
En Angola, también se puede dejar que el tren ayude a los visitantes a alejarse de la tensión. Así, tienen la posibilidad de admirar la belleza del paisaje, desde el flamante y lujoso ‘Camino de los Dos Océanos’. Este el primer servicio de pasajeros que va desde Dar es-Salam, en Tanzania, hasta Lobito, en Angola.
"Del este al oeste de África. Esto es muy especial. La recepción en Angola fue extraordinaria", explica Daphne Mabala, directora del tren.
"Fue un ‘gran’ viaje de 15 días. Todo era nuevo, todo era diferente y estoy muy impresionada con lo hermosa que es Angola", concluye Diana Buchanan, una de las turistas que pudo realizar el viaje en el flamante tren.