El papa Francisco ha concluido su viaje de tres días a Armenia levantando ampollas en Turquía.
El papa Francisco ha concluido su viaje de tres días a Armenia levantando ampollas en Turquía. En un acto celebrado en la sede del patriarcado armenio, en Etchmiadzin, el líder espiritual de la Iglesia Católica ha firmado un documento que califica de genocidio la masacre de más de 800.000 cristianos armenios perpetrada por el Imperio Otomano en 1915. Ankara se niega con vehemencia a utilizar esa palabra para definir lo ocurrido, que interpreta en el marco de una guerra con víctimas y dolor en ambas partes.
Tras una ceremonia ecuménica, el patriarca armenio, Karekin II, y el papa Francisco soltaron dos palomas frente al monte Ararat como símbolo de la reconciliación entre Armenia y los países vecinos.
Acto seguido, Jorge Mario Bergoglio puso rumbo a Roma. Con el decimocuarto viaje de su pontificado, ha tratado de ahondar en la unificación entre las Iglesias cristianas, en concreto con la apostólica, que es la oficial de Armenia.