Según ha informado el jefe adjunto de Scotland Yard, el sospechoso es un ciudadano noruego de 19 años de origen somalí.
Según ha informado el jefe adjunto de Scotland Yard, el sospechoso es un ciudadano noruego de 19 años de origen somalí.
Mark Rowley ha asegurado que, por el momento, la policía no ha encontrado pruebas de radicalización del detenido que lleven a pensar en una posible motivación terrorista. “Todo el trabajo que hemos hecho hasta ahora refuerza la tesis de que este trágico incidente se desencadenó por problemas mentales del sospechoso. Creemos que se realizó de forma espontánea y que las víctimas fueron seleccionadas de forma aleatoria”, declaraba Rowley quien también ha informado de que la mujer fallecida en el ataque registrado en la plaza Russell era estadounidense y los cinco heridos son de nacionalidad australiana, estadounidense, israelí y británica.
“Lo primero que vi fue a un oficial de policía fuertemente armado con un arma automática. Y supe que estaba pasando algo. Cuando llegamos más abajo había una fuerte presencia policial en la plaza Russell. Había muchísima policía. Avanzamos y vimos que había un cadáver en la calle cubierto con una manta y sangre por todas partes”, recuerda este testigo.
Tras el ataque, la policía ha reforzado su presencia en las calles de Londres. El alcalde de la ciudad ha pedido a los londinenses que mantengan la calma y permanezcan vigilantes.