Tras dos días de infarto, la Vuelta vivió una jornada tranquila en la décimosexta etapa que tuvo lugar entre Alcañiz y Peñíscola, un escenario completamente diferente a la montaña protagonista en los
Tras dos días de infarto, la Vuelta vivió una jornada tranquila en la décimosexta etapa que tuvo lugar entre Alcañiz y Peñíscola, un escenario completamente diferente a la montaña protagonista en los días anteriores.
El luxemburgués Jean Pierre Drucker ganó al sprint imponiéndose a los alemanes Rudiger Selig y Niklas Arndt.
En el grupo de los favoritos, la calma volvió a reinar en el ambiente. Nairo Quintana y Chris Froome cruzaron juntos la linea de meta, por lo que el colombiano sigue con el maillot de líder puesto con 3’27’‘ de margen sobre el británico del Sky.
Este martes, segundo y último día de descanso. Jornada necesaria para afrontar una última semana de la Vuelta más viva que nunca.