Los desplazamientos de tierra también han provocado la desaparición de una veintena de personas y la destrucción de cientos de viviendas.
A las 15 víctimas mortales se unen 25 heridos y entre 12 y 24 desaparecidos.
Montecito, en el condado de Santa Bárbara, es una de las zonas más afectadas.
Hoteles históricos y cientos de viviendas de lujo se encuentran devastados por el lodo debido a la fuerza del paso del agua, que corría a unos 24 kilómetros por hora, llevándolo todo a su paso.
Los equipos de emergencia rescataron a varias personas, como a los 5 miembros de esta familia que quedó atrapada por el lodo, incluyendo un recién nacido. Otro bebé fue salvado así como una joven de 14 años. Las labores de rescate continúan ya que se teme que aún queden personas bajo el barro.
Alrededor de 500 agentes del orden público y bomberos siguen inspeccionando barrios enteros cubiertos de lodo con la ayuda de perros policía, helicópteros y cámaras térmicas.
Los incendios del mes pasado arrasaron la vegetación de la zona que servía de protección, lo que favoreció los corrimentos de tierra.