El éxito y el valor para afrontar batallas difíciles parecen unir a los presidentes de Francia y Estados Unidos. Un vínculo que Macron podría utilizar para facilitar el diálogo entre Washington y la Unión Europea.
PUBLICIDADWashington no ha escatimado esfuerzos para recibir al presidente francés, Emmanuel Macron, en la primera visita de estado de la era Trump.
Contra todo pronóstico, Macron ha conseguido crear una relación de proximidad con el presidente estadounidense. Y eso le convierte en el embajador, no oficial, de la Unión Europea.
Para analizar esta relación, Euronews ha entrevistado a la analista política Kristine Berzina, del Fondo Alemán Marshall de Estados Unidos.
"¡El presidente Macron es el mejor amigo del presidente Trump a este lado del Atlántico!", explica Berzina. "Trump no ha tenido buenas relaciones con los aliados, más bien han sido muy conflictivas. Por eso, para Europa, el presidente Macron es la mejor baza para restablecer vínculos y encontrar puntos en común con Trump".
El presidente estadounidense valora sin duda la invitación que le hizo Macron al desfile del 14 de Julio en París. Pero su buena disposición podría tener un aspecto más psicológico: su debilidad por el éxito. "Macron es un ganador. Ganó claramente las elecciones. Y aunque el presidente Trump no le apoyó durante la campaña, ganó. Y los ganadores tienen una cierta ascendencia sobre Trump", afirma Berzina. Y añade que Macron, al tratar de cambiar las leyes laborales en Francia, también está librando una batalla controvertida. "Se trata de una batalla diferente, por supuesto, pero la voluntad de asumir riesgos, de hacer las cosas de otra manera, une a estos dos hombres", afirma.
Europa está preocupada por la guerra arancelaria en torno al acero y por la eventual suspensión del tratado nuclear con Irán. Y la visita de Macron a Washington debería servir para allanar el terreno. "Hay asuntos europeos que Macron va a poder tratar con el presidente Trump gracias a su buena relación", afirma Berzina. Más adelante, el viernes de esta semana, la canciller Merkel también visitará Washington. "Se trata de una visita de un día, mientras que la de Macron es una visita de tres días. Por lo tanto, se puede decir que llega para calentar motores y plantear muchas de las inquietudes europeas. Y luego los demás seguirán, pero Macron será el primero en llevar el mensaje", concluye