El presidente estadounidense dijo que la llegada de inmigrantes ha cambiado violentamente la cultura europea.
PUBLICIDADDonald Trump echa leña al fuego del debate sobre la inmigración en Europa. En medio del escándalo que ha provocado en muchos sectores de Estados Unidos la separación de unos dos mil niños inmigrantes de sus padres al cruzar las fronteras, el presidente estadounidense ha dicho en un tuit que el pueblo alemán se ha puesto en contra de sus líderes, que la criminalidad ha aumentado en el país y que la llegada de millones de personas ha cambiado fuerte y violentamente la cultura europea.
Lee: Ultimátum a Merkel para que negocie una solución europea al desafío migratorio
Además, el mandatario estadounidense afirmó que "Estados Unidos no será un campamento de inmigrantes ni un centro de detención de refugiados, ¡no lo será! Miren lo que está pasando en Europa, miren lo que está pasando en otros lugares, no podemos permitir que eso le pase a Estados Unidos, no bajo mi mandato".
Naciones Unidas no ha tardado en criticar la postura de Donald Trump. El portavoz del Secretario General de la Organización, Stéphane Dujarric, dijo: "Como cuestión de principio, el Secretario General considera que los refugiados y los migrantes deben ser tratados siempre con respeto y dignidad, conforme al derecho internacional vigente. Los niños no deben ser traumatizados por estar separados de sus padres. La unidad familiar debe ser preservada."
Con la política de tolerancia cero de EE.UU., los adultos que intentan cruzar ilegalmente la frontera son puestos bajo custodia y se enfrentan a procesos penales por entrada ilegal. Sus hijos, que no están acusados de ningún delito, son llevados a instalaciones separadas.