Las dos principales formaciones de país intentan poner fin a un conflicto que dura más de cuarenta años y al que se ha intentado poner fin en dos ocasiones previas
Nuevo avance hacia la estabilidad de Mozambique. Gobierno y oposición han firmado un acuerdo en Maputo este martes para la reconcilación entre las dos partes enfrentadas desde hace más de cuarenta años. En el tercer pacto, tras los de 1992 y 2014, pero "este proceso que hemos empezado es irreversible", según ha dicho el presidente Filipe Nyusi,
La última mecha que encendió el enconado conflicto fueron las elecciones de 2014, en las que la opositora Resistencia Nacional Mozambiqueña (Renamo), creada por los servicios secretos de Sudáfrica y la antigua Rodesia (actual Zimbaue), acusó de fraude electoral al Frente de Liberación de Mozambique (Frelimo), antigua guerrilla marxista que rige el país desde la in dependencia en 1975. A pesar del acuerdo, firmado a dos meses de los comicios generales del 16 de octubre, el brazo armado de la Renamo rechaza entregar las armas y su líder ha aseverado que solo lo hará después de unas elecciones internas en la formación.
La Unión Europea, en cualquier caso, se ha mostrado optimista en cuanto al camino hacia la paz de Mozambique. Bruselas ha invertido sesenta millones de euros para apoyar el desarrollo económico, reintegrar a los antiguos combatientes y promover la reconciliación.