Los típicos locales que venden el clásico de la gastronomía nacional y pollos asados para llevar pueden seguir abiertos.
Es una de las actividades que permite la ampliación del decreto de estado de alarma en España. Los comercios que venden pollos asados y tortillas que los ciudadanos comen luego en sus hogares podrán permanecer abiertos. Eso sí, en las colas hay que mantener más espacio, pero algunos pueden mantener la tradición. Una señora subraya que acude todos los sábados y domingos a un local a por comida, "incluso con el virus".
A pesar de poder continuar abriendo, estos negocios se han visto mermados por el confinamiento obligatorio. Son muchos los que ahora emplean el tiempo en cocinar en casa. Aunque también hay otros motivo, que explica Joan José López, propietario de una tienda: "Los fines de semana es un momento para que las familias se reúnan y eso no está pasando. Además, el fin de semana era un momento para descansar, pero debido al confinamiento, eso también ha cambiado.".
La situación da pistas sobre lo que puede estar por venir en España tras la crisis sanitarias del coronavirus. Algunos expertos sostienen la economía podría sufrir su peor caída en cuarenta años. El PIB, al final de este año, podría contraerse alrededor de un 5%