Semana Santa a puerta cerrada con los desplazamientos vacacionales prohibidos, sin procesiones ni celebraciones religiosas debido a la pandemia.
Las iglesias de la mayor parte de los países de la Unión Europea no abrirán en estos días. Sin embargo, a pesar de las medidas de cuarentena, son bastantes los que han quebrado el confinamiento para desplazarse.
Así ha sido en Eslovaquia. Las restricciones incumplidas para viajar este fin de semana se han materializado en largos atascos en los que policía y ejército filtran a los conductores con motivos para desplazarse de los que van a un lugarr turístico o a una segunda casa.
En Irlanda los principales destinos turísticos advierten a sus habituales visitantes que eviten acercarse. Así es en la localidad turística y balnearia de Bundoran, en el condado de Donegal, donde están en guardia ante la llegada de turistas del interior de Irlanda o de Irlanda del Norte. Aquí la actividad económica depende en gran medida del turismo pero han decidio cerrar puertas.
En España, la casa se ha transformado en el centro de la vida y también de la relación de vecindad con los otros, de ventana a ventana. Recurso indispensable para muchos para mantener el buen ánimo. España pasa esta Semana Santa en confinamiento obligado y desplazamientos vacacionales prohibidos, sin procesiones ni celebraciones religiosas debido a la pandemia.