Protestas en Rumanía durante el Festival "Tusványos" contra Orbán generan agitación política en Transilvania. Nacionalistas expresan su descontento y tensiones se desatan en la entrada del evento. Orbán aborda asuntos internacionales y critica la vulnerabilidad de la Unión Europea.
PUBLICIDADNacionalistas rumanos protestan contra el primer ministro húngaro durante el festival Tusványos en Transilvania
Durante el festival Tusványos en la región rumana de Transilvania, se llevaron a cabo manifestaciones por parte de los nacionalistas rumanos, repitiendo lo sucedido el año anterior. Su objetivo era interrumpir el discurso del primer ministro húngaro, pero se encontraron con un obstáculo en la entrada del festival, donde la policía y los gendarmes les impidieron el paso. Alrededor de unas decenas de manifestantes portaban pancartas que expresaban su rechazo hacia Orbán.
Uno de los manifestantes rumanos expresó su descontento diciendo: "Viktor Orbán tiene los mismos principios terroristas que el presidente ruso, quien es un criminal internacional. Quieren ocupar y anexar territorios".
Aprovechando la ocasión, el primer ministro húngaro abordó temas relacionados con China y Estados Unidos, así como la idea de un nuevo orden mundial. En sus palabras: "La guerra no es inevitable. La condición para evitarla es que el mundo pueda encontrar un nuevo equilibrio. La pregunta es cómo lograrlo. La verdad es que esto corresponde a los grandes actores, y nosotros no hemos sido favorecidos en esta situación. Los jugadores principales en la escena política deben aceptar que hay dos soles en el cielo".
Es importante destacar que Orbán realizó su primer discurso en el festival en 1998, recién asumido como primer ministro, donde enfatizó la importancia de que Hungría perteneciera a la OTAN. Ahora, en su discurso actual, habló sobre la Unión Europea como una entidad rica pero vulnerable que se siente acorralada. Describió a la UE como un antiguo campeón de boxeo que muestra sus cinturones, pero ya no está dispuesto a subir al ring.
El festival Tusványos ha sido históricamente un evento donde se debaten temas políticos y culturales de importancia en la región, y este año no fue la excepción, marcado por las manifestaciones y discursos que reflejan tensiones y preocupaciones en la zona.