Cinco personas resultaron heridas en el segundo ataque de un oso en Eslovaquia en tres días. El oso llegó a la ciudad de Liptovský Mikulás alrededor del mediodía del domingo 17 de marzo y pasó unos 20 minutos en zonas residenciales.
PUBLICIDADEl oso llegó a la ciudad de Liptovský Mikulás, en el norte de Eslovaquia, alrededor del mediodía del domingo 17 de marzo y pasó unos 20 minutos en zonas residenciales antes de internarse en el bosque.
Los servicios municipales de Liptovský Mikulás, advirtieron que había una alarma y pidieron a los vecinos que se mantuvieran cerca de sus casas, especialmente a primeras horas de la mañana y de la tarde. El oso llegó a la ciudad alrededor del mediodía del domingo 17 de marzo y delambuleó unos veinte minutos por zonas residenciales antes de internarse en el bosque.
Cámaras, drones y patrullas para matar al oso
Seis patrullas vigilan buscan al osos equipados con un dron, equipos de visión térmica, visión nocturna y otros elementos de observación, según el ayuntamiento. En las patrullas también se utilizaron cámaras trampa y armas para encontrar al oso. Los agentes recibieron instrucciones de matar al animal si lo avistaban.
Este incidente se produce apenas dos días después de la muerte de una mujer bielorrusatras ser perseguida por un oso en un bosque de montaña en el norte de Eslovaquia el viernes 15 de marzo por la noche, según los servicios de protección civil.
Una niña de 10 años y dos adultos más sufrieron rasguños y contusiones, dijeron las autoridades, mientras que una pareja que empujaba a su hijo en un cochecito tuvo "suerte de escapar ileso". Las autoridades también dijeron que el oso no estaba localizado y que seis patrullas armadas intentan encontrarlo.
Los osos normalmente se mantienen lejos de los humanos
Los estudiosos del comportamiento animal se refieren a los osos como animales que centran su actividad en su propio entorno espacial sin irrumpir en ciudades ni pueblos. Ocasionalmente ha habido incidentes en Noruega, India, Rumanía pero son muy raros. En Italia se produjo un intenso debate en abril del año pasado entre animalistas y autoridades municipales sobre si era segura la presencia de osos en la región de Trentino.