En total, a lo largo de la semana de festival, en Annecy se proyectan cerca de 500 películas de todos los formatos, técnicas y géneros, en el marco de numerosos concursos, tanto de largometrajes como de películas realizadas como proyecto de fin de estudios.
PUBLICIDADCada año, el mundo de la animación se reúne en Annecy, en el corazón de los Alpes franceses. El público acude desde todas las partes del mundo para no perderse el completo programa compuesto de más de 50 actos, mesas redondas, clases magistrales, encuentros, sesiones de firmas, proyecciones al aire libre y preestrenos. En total, a lo largo de la semana se proyectan cerca de 500 películas de todos los formatos, técnicas y géneros, en el marco de numerosos concursos, tanto de largometrajes como de películas realizadas como proyecto de fin de estudios.
"Insistimos en ser la ‘capital mundial del cine de animación’. Eso significa contar con las ‘grandes estrellas’, que disponen de los mayores presupuestos de la animación, los grandes estudios: Pïxar, Disney, Warner, Paramount... las grandes plataformas como Netflix, Amazon y Apple, que están presentes aquí, así como también, los creadores independientes, y los estudiantes, que son las estrellas del mañana", declara el director artístico, Marcel Jean.
El festival de Annecy no es solamente un festival dedicado al espectáculo, sino también, un lugar de encuentro, y un trampolín para los futuros profesionales del sector. En cualquier caso, muchos proyectos se ponen en marcha aquí, entre otras cosas, porque los creativos están en contacto directo con los productores.
Entre los largometrajes a concurso figura ‘Sueños de robot’; una película presentada en una proyección especial en el pasado Festival de Cannes, que narra la historia de una amistad inquebrantable entre un robot y un perro, en el Nueva York de los años 80.
El cineasta español Pablo Berger considera que la animación permite contar cualquier historia.
"Me siento como un director primerizo. ‘Sueños de robot’ es mi cuarta película, pero es mi primer largometraje de animación. Estoy presente en el mayor festival de animación del mundo. Así que, si quería contar esta historia, quería introducir la animación, y pensé que la animación podía ser una buena manera de ‘contar emociones’. Si nos fijamos en grandes directores como Takahata, Miyazaki… ellos hablan de emoción. La animación no tiene que ser solamente comedia y acción", afirma el director de cine, Pablo Berger.
La animación es, a la vez, un arte y una industria. En el Hotel Imperial, junto al lago, se celebra el Mercado internacional de cine de animación, MIFA; esta es la parte del festival que, realmente, hace de Annecy el mayor acontecimiento mundial dedicado a la animación y a todas sus facetas.
"El evento de Annecy es único en el mundo, en el sentido de que acoge a toda la cadena de la animación, y todos los géneros y estilos. Así que, recibimos a las escuelas de animación, y también a 3 600 estudiantes este año, de entre los más de 15 000 acreditados. Además, contamos con las nuevas tecnologías. Porque, por supuesto, en la animación se necesitan herramientas. Y, también contamos con los productores, los emisores, las cadenas de televisión... hasta la distribución cinematográfica", señala Véronique Encrenaz, directora del MIFA.
Como cada año, un país es protagonista del festival. En esta ocasión México ha sido el elegido. Actualmente, la producción de películas de animación en México está en pleno auge. El Festival de Cine de Animación de Annecy se celebra hasta este próximo 17 de junio.