Místicos, hippies o simples curiosos se reúnen junto al Stonehenge para celebrar el solsticio de verano
PUBLICIDADUna experiencia única que se vive una vez al año. Un grupo heterogéneo se reunió en Stonehenge, al sur de Inglaterra, para celebrar el solsticio de verano, el día más largo del hemisferio norte. Místicos, hippies o simples curiosos cantaron, bailaron y cantaron mientras el sol se elevaba sobre las antiguas y misteriosas piedras que se alzan sobre la llanura de Salisbury.
El sitio, declarado Patrimonio de la Humanidad, estuvo abierto al público desde las 19:00 del Reino Unido el martes hasta las 8:00 de la mañana del miércoles. Es la única noche del año en la que se permite permanecer durante un periodo prolongado en el interior del círculo de piedras.