El mandatario francés ya ha enviado a los funcionarios libaneses un primer documento en el que se esboza las reformas que deben llevarse a cabo, incluída una auditoría de las finanzas del Estado y la reestructuración del sector energético.
Beirut aún se tambalea por la mortífera explosión en su puerto ocurrida el 4 de agosto y que destruyó gran parte de la ciudad. Pero la explosión también fue social, fuertes protestas contra la élite gobernante, acusada de corrupción y mala gestión, llevaron a la dimisión del primer ministro y su gabinete.
Hasta ahora, las rivalidades y los intereses políticos han impedido la formación de un nuevo gobierno. Que no es solo necesario para hacer frente a las consecuencias del suceso sino también para afrontar la peor crisis económica que ha sufrido el país en décadas.
Más del 55% de la población vive por debajo del umbral de pobreza. Casi el dobre de la tasa del año pasado, según un último informe especializado de la ONU.
En su visita a Beirut poco después del incidente del puerto, el Presidente francés Emmanuel Macron prometió al pueblo libanés que no se quedaría solo. Macron regresará a la capital para impulsar la formación de un nuevo gobierno que pueda implementar reformas urgentes y desbloquear la ayuda internacional. Esta visita es vista como una fuente de esperanza para muchos ciudadanos que anhelan un cambio.
El mandatario francés ya ha enviado a los funcionarios libaneses un primer documento en el que se esboza las reformas que deben llevarse a cabo, incluída una auditoría de las finanzas del Estado y la reestructuración del sector energético.
Los economistas creen que esta vía allana el camino para superar la crisis de múltiples frentes.
"Francia ha hecho mucho, ha reaccionado rápidamente proporcionando ayuda a las principales instituciones afectadas por la explosión y por el colapso financiero y económico. Pero lo más importante es que ha convocado un esfuerzo internacional para apoyar al Líbano. Francia, como país extranjero, está tratando de salir del estancamiento político, tratando de utilizar la coyuntura para condicionar el comportamiento de la clase política a que responda a las expectativas de los ciudadanos", comentó a Euronews Alia Moubayed, una economista en Beirut.
¿Se traducirá la visita de Macron en soluciones tangibles y será el tan esperado punto de inflexión para un mejor Líbano?