Faltan más de seis meses pero ya huele a campaña electoral en Francia. y el presidente francés, Emmanuel Macron, parece estar buscando en el contacto con la gente la receta mágica de la reelección. En Lyon, capital gastronómica mundial, Macron ha pasado por el Salón Internacional de la Restauración
Faltan más de seis meses pero ya huele a campaña electoral en Francia. y el presidente francés, Emmanuel Macron, parece estar buscando en el contacto con la gente la receta mágica de la reelección. En Lyon, capital gastronómica mundial, Macron ha pasado por el Salón Internacional de la Restauración, la Hostelería y la Alimentación para dar ánimos a los profesionales del sector, muy castigado por la pandemia... El Estado les ha ayudado mucho económicamente, pero el futuro no está del todo despejado: hay escasez de vocaciones. Macron presenta medidas para incentivarlas:
- "Hemos decidido que las propinas se puedan pagar con tarjeta de crédito, que se pueda redondear, que sean gratuitas para los empresarios y libres de impuestos para los empleados que las reciben. Esto contribuirá a atraer a más jóvenes y a no tan jóvenes, a los que estaréis en condiciones de decir que podrán ganar más que el sueldo y que la prima que les pagáis."
La visita de Macron no fue del gusto de todos, un hombre lanzó un huevo al presidente. Le alcanzó en el cuello y rebotó, por lo que es de suponer que era un huevo duro. Mientras los guardaespaldas del mandatario protegían al presidente, las personas que estaban en el evento afeaban el gesto al agresor.