El político gallego tiende la mano al presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez. Se propone cerrar la grave crisis interna de la formación conservadora, dar confianza y ganar las próximas elecciones generales.
Alberto Núñez Feijóo sabe mucho de mayorías absolutas.
Las ha conseguido desde 2009, en cuatro elecciones consecutivas en Galicia. Ahora, tras el congreso extraordinario de Sevilla, toma el relevo de Pablo Casado, arropado por la plana mayor y las bases del Partido Popular.
Salir a ganar
Tiene ante sí grandes retos. El primero, cerrar precisamente la grave crisis abierta por su antecesor en la formación conservadora y reposicionarla en la política española. Subraya para ello su talante moderado, pero firme.
"Para dejar de ocultar los problemas que hay y que se sabe que vendrán, garantizamos nuestro apoyo al Gobierno. Para agilizar las medidas que los españoles necesitan garantizamos nuestro apoyo al Gobierno, para cesar a los ministros que hacen oposición desde el Gobierno, garantizamos nuestro apoyo al Gobierno".
Recuperar la confianza
Núñez Feijóo porta una nueva solidez al principal partido de la oposición. Buscará recuperar la confianza en su nicho de votantes, atraer la de liberales y socialistas desencantados y convertirse en el próximo presidente del Gobierno.
"Tenemos ganas de ganar. Porque creemos que lo podemos hacer mejor. y creemos que nuestro país lo necesita. Pero no tenemos ansiedad por llegar de cualquier forma a la meta".
Es gallego, licenciado en derecho y tiene sesenta años. El equipo del presidente del ejecutivo, el socialista Pedro Sánchez, ya ha contactado con él para una primera reunión la próxima semana.