Los expertos en desinformación afirman que nos enfrentamos a una "crisis de información" sobre el clima en X, Facebook e Instagram antes de la COP28. Este año se ha producido un ‘resurgimiento’ del negacionismo absoluto del cambio climática, según un informa de la CAAD.
PUBLICIDADLa desinformación está exacerbando la crisis climática, advierten los expertos mientras los líderes mundiales se preparan para reunirse en la COP28 en Dubai.
En 2023, se podría pensar que las dudas generalizadas sobre los hechos científicos del cambio climático —y la urgente necesidad de actuar al respecto— se han disipado.
Sin embargo, este año se ha producido un ‘resurgimiento’ del negacionismo absoluto, así como nuevas tácticas insidiosas por parte de las grandes petroleras y actores de mala fe en Internet, según revela un nuevo informe de la coalición Acción por el Clima contra la Desinformación (CAAD).
"En vísperas de la COP28, el mundo se enfrenta a una crisis medioambiental agravada por una crisis de información", afirma Jennie King, jefa de Investigación y Política Climática del Instituto para el Diálogo Estratégico y directora de Inteligencia del CAAD.
"2023 será el año más caluroso jamás registrado y, sin embargo, la acción climática urgente que necesitamos se ve acosada por el negacionismo y las campañas virales que rechazan el consenso científico. Estos contenidos no solo socavan el apoyo público, sino que erosionan cada vez más la confianza en las instituciones y están produciendo resultados violentos."
Informaciones falsas y desinformación sobre el cambio climático
Si ha estado en Twitter, que este año se ha transformado en X, o ha sido bombardeado con dudosos anuncios en Facebook e Instagram, probablemente tenga una idea de a qué se enfrentan los CAAD.
Existe la información falsa o fuera de contexto que se presenta como un hecho, así como un tipo de desinformación intencionadamente manipulada y destinada a engañar.
Pero ¿quién está exactamente detrás de esta crisis de información? Como demuestran las investigaciones del CAAD, se están forjando algunas conexiones insólitas.
"Los esfuerzos profesionalizados del grupo de presión de los combustibles fósiles se cruzan ahora con las relaciones públicas patrocinadas por el Estado, los estafadores en línea y los desinformadores comerciales", añade King.
He aquí cuatro tendencias clave a tener en cuenta.
1. #ClimateScam es ahora tendencia constante en X
El uso del hashtag #ClimateScam se disparó repentinamente en Twitter en julio de 2022. En noviembre ya aparecía sistemáticamente entre los primeros resultados, una situación especialmente preocupante durante la COP27. La función de autocompletar de X en la barra de búsqueda sigue dirigiendo a los usuarios hacia él, incluso con búsquedas incompletas que empiezan por #cl.
La viralidad de una ‘estafa climática’ desconcertó inicialmente a los expertos, ya que el término parecía ser tendencia a pesar de que los datos mostraban más actividad y compromiso en otros hashtags como #ClimateCrisis y #ClimateEmergency.
Pero a diferencia de 2022, el CAAD señala que este patrón se asocia ahora con claras tendencias en el rendimiento y la naturaleza viral de las publicaciones relacionadas en toda la plataforma.
La popularidad de #ClimateScam parece estar impulsada por un pequeño grupo de cuentas que han visto crecer su audiencia desde que Elon Musk privatizó X, afirma CAAD. Por ejemplo, una cuenta pasó de tener sólo 322 seguidores desde su primera publicación de #climatescam en marzo, a tener más de 256 000 seguidores en la actualidad.
El hashtag se utiliza para negar la contribución del cambio climático a los fenómenos meteorológicos extremos en todo el mundo en X, que sigue siendo un importante foro público para comentar noticias en directo.
2. Los sitios web que publican desinformación sobre el clima se lucran a través de anuncios
15 sitios web que publican desinformación popular sobre el clima, entre ellos —según la CAAD— The Daily Telegraph, Breitbart y Sky News Australia, se lucran con estos contenidos.
PUBLICIDADEl periódico británico The Daily Telegraph, por ejemplo, publicó 171 artículos de opinión sobre cuestiones medioambientales durante el año pasado. De ellos, el 85 % atacaba y/o socavaba la ciencia, la política o los grupos asociados al clima, según el sitio web periodístico y activista DeSmog.
Las bolsas de anuncios (o empresas de ‘tecnología publicitaria’) son mercados en los que se compra y vende publicidad en línea. Muchas de las empresas que dan servicio a estos nuevos sitios -como Google y Amazon- tienen políticas destinadas a impedir que los editores accedan a sus productos si el contenido que alojan contradice la ciencia sobre el cambio climático.
Pero CAAD descubrió que más de 150 intercambios publicitarios permiten la monetización de la desinformación sobre el cambio climático.
Esto significa que muchas marcas alineadas con la descarbonización aparecen junto a estos artículos, muy probablemente sin su conocimiento y en contra de sus valores corporativos declarados.
3. Las grandes petroleras gastan millones en anuncios de Meta
Sólo 13 empresas de combustibles fósiles gastaron hasta 5,21 millones de dólares (4,75 millones de euros) en publicidad entre enero y octubre de 2023, según la biblioteca de anuncios de Meta. Las empresas consiguieron así 2 562 anuncios en Facebook.
PUBLICIDADSin embargo, dado que la CAAD solo podía ver los anuncios que afectaban a ‘asuntos sociales, elecciones o política’, la coalición afirma que el gasto de las empresas puede superar ampliamente esta cifra.
Las empresas de combustibles fósiles -Shell, ExxonMobil, BP y TotalEnergies- representaron el 98 % del gasto en publicidad identificado.
Los gigantes del petróleo y el gas suelen alardear de sus inversiones en energías renovables ante el público, pero el análisis de CAAD es otra mirada chocante al abismo.
El contenido de los anuncios suele destacar la sostenibilidad u otras credenciales ‘socialmente progresistas’ de las grandes empresas del carbón en cuestión. Sin embargo, según un nuevo informe de la Agencia Internacional de la Energía, las empresas de combustibles fósiles sólo aportaron el 1 % de la inversión mundial en energías limpias en 2022.
4. Los medios de comunicación estatales rusos instrumentalizan los debates sobre el clima
En las tormentas de desinformación sobre el clima en las redes sociales, las cuentas rusas respaldadas por el Estado aparecen como agentes del caos.
PUBLICIDADEstas cuentas no tienen mensajes coherentes sobre la ciencia del clima, la acción o el suministro de energía, según CAAD. En su lugar, utilizan estos temas para reforzar sus campañas de influencia dirigidas a los países occidentales y al Sur Global, respectivamente.
La forma en que los medios de comunicación estatales rusos y las cuentas de las embajadas rusas publican sobre energía depende mucho de quién se trate. Las inversiones en combustibles fósiles en África fueron condenadas como intentos de "robar" los recursos del continente cuando se relacionaban con países occidentales, afirma el CAAD, pero aclamadas como defensores del desarrollo económico cuando se relacionaban con Rusia.
Las cuentas rusas también han intentado desacreditar las sanciones petroleras impuestas por los gobiernos occidentales tras la invasión de Ucrania. La CAAD descubrió que habitualmente vilipendian a los manifestantes contra el cambio climático en países europeos, con mensajes en alemán, inglés, francés y español que ponen de relieve la naturaleza perturbadora del activismo.
Los analistas también han observado un aumento de las descripciones explícitamente negativas y los ataques personales a personalidades relacionadas con el clima, especialmente Greta Thunberg. Por ejemplo, un post en inglés publicado en Facebook por el medio de comunicación ruso RT, controlado por el Estado, se refiere a Greta como "Dr. Climate Gollum".
Con la COP28 que comienza mañana, King concluye que "debemos reconocer la amenaza de la información falsa y la desinformación como lo que es: una barrera a la cohesión, a la acción y a un futuro habitable para todos".
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