El evento anual de la Rapa das Bestas, que data del siglo XV, reúne a los jóvenes locales de Galicia al amanecer, quienes suben a las montañas para congregar a los caballos salvajes que deambulan libremente por la región.
Trabajando en pequeños grupos, los 'aloitadores' (como se conoce a quienes participan en la 'rapa') conducen a los animales de regreso al pueblo para el ritual tradicional de cortar sus crines y sanearlos. Esta práctica implica una serie de movimientos coordinados y de gran destreza, realizados únicamente con la fuerza del cuerpo, sin cuerdas ni herramientas.
Al caer la noche, el pueblo se reúne al final del evento para disfrutar de comida, música y festividades, celebrando la rica herencia de esta antigua tradición gallega.