Chile: sequía histórica y funesta en un país con el agua privatizada. El ganado muere de hambre y las lagunas se secan, mientras los manifestantes gritan: "El agua es un derecho, no es un negocio"
PUBLICIDADEn el Chile del estallido social hay un motivo del que se habla muy poco: el agua, o más bien, el hecho de que el 80 % de los recursos hídricos están privatizados, mientras el país sufre la peor sequía de su historia.
La situación, que ya se considera crítica, afecta a tres cuartas partes del territorio. En Putaendo, a un centenar de kilómetros al norte de la capital, Santiago, el ganado se muere de sed y hambre en los campos resecos, para desesperación de ganaderos como Alfredo Estay, que a sus ochenta años, nunca ha visto nada parecido.
"No las cuento (las vacas muertas), porque todos los días amanece una muerte, dos, tres (...) Y no doy más, ya no tengo cómo alimentarlos", se lamenta.
Laguna de Aculeo: de atractivo turístico a tumba de animales muertos
La imagen más impactante de la sequía es la de la laguna de Aculeo, al sur de Santiago. Hace no mucho era un gran atractivo turístico para los habitantes de la capital. Hoy, se ha secado por completo. Solo quedan muelles fantasma y animales muertos.
"Estamos hablando de desertificación" y esto plantea "un desafío económico"
Según Felipe Machado, director del Instituto Tecnológico de Resiliencia ante Desastres. "estamos hablando de un proceso de desertificación y no de un problema de sequía temporaria o de ausencia de precipitaciones. Estamos hablando de una tendencia que ha llegado para quedarse".
Al calentamiento climático se suma una mala gestión del agua. La privatización de los recursos hídricos en Chile fue un modelo impuesto por el ultraliberalismo de la dictadura de Augusto Pinochet. Se calcula que hoy día solo el 2 % se destina a uso humano, mientras el 98 % se utiliza para actividades mineras, agrícolas y energéticas.
"Todo lo que exportamos desde Chile, desde el vino hasta el cobre dependen mucho del recurso hídrico. En ese sentido, el escenario de desertificación y cambio climático tiene que plantear también un desafío a nivel económico", añade Machado.
"El agua es de todos", el lema de las protestas
"El agua es de todos", "el agua es un derecho, no es un negocio y un comercio" son algunas de las consignas que se escuchan desde hace dos meses en Chile, donde en principio estaba previsto que se celebrara la COP25 contra el cambio climático.
Una de las exigencias de los manifestantes es que en una futura Constitución el agua vuelva al Estado y su disfrute se reconozca como un Derecho Humano.