Animar a unos 13.500 adolescentes a empezar a conducir camiones sería un experimento peligroso, que llevaría a muchos más del grupo de conductores de mayor riesgo al volante de vehículos que causan la mayor devastación cuando chocan, escribe Antonio Avenoso.
PUBLICIDADImagina que conduces un coche por una carretera rural de noche con tus hijos dormidos en la parte de atrás. Hay un poco de niebla y la visibilidad es reducida. De repente, un camión articulado de 40 toneladas viene hacia ti desde la dirección contraria.
A medida que se acerca, sólo una línea blanca de puntos en la carretera os separa a ti y a tu familia del olvido. ¿A quién quiere al volante de ese camión? ¿Un conductor con varios años de experiencia conduciendo en esas condiciones? ¿Qué tal un adolescente recién salido de la escuela?
Los grupos de presión de la industria vial quieren adolescentes al volante
Desde 2006, la Unión Europea recomienda sensatamente una edad mínima de 21 años para los conductores de camiones y de 24 para los de autobuses. Pero en los últimos años, la industria del transporte por carreteraha presionado para rebajar estos mínimos como forma barata de resolver la crisis de contratación en el sector.
Ofrecer mejores condiciones, tiempos de conducción y descanso más razonables y menos tiempo fuera de casa está fuera; contratar a jóvenes que acaban la escuela está dentro.
La presión del sector ha funcionado. Con el beneplácito de la UE, varios Estados miembros han rebajado la edad mínima -generalmente hasta los 18 años para los conductores de camiones- siempre que los jóvenes hayan completado una formación profesional adicional además de los exámenes prácticos y teóricos exigidos.
Pero la guinda del pastel para el sector del transporte sería que todos los Estados miembros estuvieran obligados a hacerlo y los adolescentes pudieran conducir camiones por todo el continente.
El sector quiere ir aún más lejos y permitir a los jóvenes de 16 y 17 años iniciarse en la conducción acompañada de camiones, para empezar a conducir solos en cuanto cumplan los 18 años.
El pasado mes de marzo, la Comisión Europea cedió a la presión y publicó una propuesta de revisión de la normativa sobre permisos de conducir que obligaría a los Estados miembros a ofrecer un sistema de conducción acompañada que permitiera a los jóvenes de 17 años conducir un camión. Y en diciembre, la Comisión de Transportes del Parlamento Europeo apoyó la medida. La Comisión Europea calcula que 13.500 jóvenes de 17 años podrían empezar a conducir camiones.
Se podría pensar que hay una base científica sólida para este cambio propuesto. Pero no la hay. La industria declara que no tendría ningún impacto en la seguridad vial. No ha aportado pruebas ni datos que respalden esta opinión.
Las estadísticas sobre jóvenes camioneros son muy preocupantes
Peor aún, la Comisión Europea tampoco ha investigado bien esta cuestión. El razonamiento para el cambio dado en la evaluación de impacto oficial se basa en el hecho de que un programa de conducción acompañada para conductores de coches de 17 años en Alemania mostró resultados positivos para la seguridad vial.
Esto no es suficiente. El trabajo de un camionero profesional es muy distinto del de un conductor ocasional de automóvil. Y cuando un camión choca, la devastación causada puede ser absolutamente catastrófica.
Un adolescente que provocara un accidente de este tipo viviría con las consecuencias durante décadas. Las familias de las víctimas nunca superarían su dolor.
En el ETSC hemos analizado los datos disponibles sobre conductores adolescentes de camiones y son extremadamente preocupantes.
Una investigación de la Asociación Alemana de Seguros (GDV) muestra que los conductores de camiones de entre 18 y 20 años causaron un número mucho mayor de colisiones con resultado de lesiones, en relación con el número de licencias registradas para ese grupo de edad, en comparación con todos los demás grupos de edad de conductores de camiones.
El ETSC también ha analizado los datos de Finlandia y Polonia, otros países que permiten conductores de camiones más jóvenes, y muestra lo mismo.
Un año de conducción acompañada es mejor que nada. Pero es poco probable que revierta el daño que se está haciendo al aumentar masivamente el número de conductores de camiones menores de 21 años.
La idea debe frenarse en seco
La ciencia demuestra que la inexperiencia es sólo uno de los múltiples factores que afectan a los jóvenes conductores. Los jóvenes experimentan importantes cambios biológicos y sociales entre los 15 y los 25 años. El desarrollo cerebral es continuo a lo largo de este periodo y no se completa hasta bien entrada la veintena.
En consecuencia, cuando los jóvenes están aprendiendo a conducir, sus capacidades cognitivas aún no están completamente desarrolladas. Esto afecta a su percepción del riesgo y a su actitud ante él mismo. El desarrollo cognitivo durante la pubertad puede conducir a una mayor inestabilidad emocional y a un comportamiento más asertivo.
PUBLICIDADAsí, como usuarios de la carretera, los jóvenes tienden a mostrar comportamientos de riesgo y a tener una menor apreciación de los peligros a los que se enfrentan. Las investigaciones biológicas demuestran que, a los 18 años, las áreas del cerebro humano responsables de la integración de la información y del control de los impulsos están aún en desarrollo.
Animar a otros 13.500 adolescentes a empezar a conducir camiones sería un experimento vasto y peligroso, que llevaría a muchos más del grupo de conductores de mayor riesgo al volante de vehículos que causan la mayor devastación cuando chocan.
El próximo mes, el pleno del Parlamento Europeo puede decidir el destino de esta propuesta. Esperamos que los eurodiputados reflexionen sobre las implicaciones de lo que supondría un grave retroceso para la seguridad vial en Europa. Que los adolescentes conduzcan camiones es una idea que debe frenarse en seco.
Antonio Avenoso es director ejecutivo del Consejo Europeo de Seguridad en el Transporte.
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