Con el apoyo de Palin, Trump busca el favor del sector más a la derecha de los conservadores, el Tea Party. En esta jugada, por supuesto hay un perdedor: Ted Cruz.
Donald Trump saca la artillería. A menos de dos semanas del pistoletazo oficial del largo proceso electoral en Estados, con el Caucus de Iowa el primero de febrero, el candidato republicano a la Casa Blanca mejor colocado en los sondeos ha ganado a una aliada de peso para su campaña: la exgobernadora de Alaska, Sarah Palin.
Con el apoyo de Palin, Trump busca el favor del sector más a la derecha de los conservadores, el Tea Party. En esta jugada, por supuesto hay un perdedor: Ted Cruz, que pisa los talones a Trump en las encuestas por la nominación en el Partido Republicano.
Palin apoyó a Cruz para el Senado en 2012 y hasta ahora siempre había elogiado tanto al senador hispano como al empresario. Hasta hoy. En la Pole Position de la carrera hacia la Casa Blanca, Palin ha elegido a Donal Trump.
En las últimas horas, Trump ha obtenido el llamado “endorsement” de otras personalidades en EEUU, como la hija de John Wayne, Aissa Wayne.
A true honor to receive the endorsement of John Wayne's daughter….read: https://t.co/X6jR0WVBvd pic.twitter.com/1e6gk0PsQH
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 19, 2016