Comenzaron las elecciones parlamentarias en medio de la guerra civil que azota al país desde hace más de cinco años. Bashar al-Asad defendió la
PUBLICIDADComenzaron las elecciones parlamentarias en medio de la guerra civil que azota al país desde hace más de cinco años.
Bashar al-Asad defendió la legitimidad de los comicios y se presentó esta mañana a las urnas junto a su esposa en la ciudad de Damasco.
La oposición al Gobierno de Al-Asad y Estados Unidos han considerado ilegítimas las votaciones, organizadas en las regiones bajo control del régimen de Damasco.
En imágenes de la televisión siria, Al-Asad dijo que: “El terrorismo ha destruído la infraestructura y ha hecho correr mucha sangre. Sin embargo, no ha logrado su objetivo: la destrucción de la infraestructura principal de Siria que es la identidad nacional. Por esta razón, aquellos que apoyan el terrorismo trabajan en paralelo respaldándose en la política, porque la identidad política es defendida por la Constitución.”
En las regiones de Al Raqa e Idleb, al norte del país, no se celebran las elecciones parlamentarias, ya que ambas están bajo el dominio de grupos terroristas.
Un estudiante de secundaria dice que su voto es como una bala para los enemigos: “Estoy aquí para seguir con la resistencia y para apoyar al Ejército Sirio.”
Colegios, salones de hoteles, oficinas de ministerios y de empresas sirven como centros de votación.
“Lo que pedimos es poder tener una vida normal, porque la que tenemos ahora no es la mejor”, afirma una votante.
“Deseo que los refugiados vuelvan al país y que los precios de las cosas sean los de antes”, expresa otro votante.
En total, unos 3.500 candidatos concurren a estas elecciones para las que se han habilitado 7.191 centros de votación.