Las llamas siguen provocando el caos en la ciudad canadiense de Fort McMurray, en el noroeste del país. Las autoridades locales ordenaron la
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Las llamas siguen provocando el caos en la ciudad canadiense de Fort McMurray, en el noroeste del país. Las autoridades locales ordenaron la evacuación de toda la población, de 80.000 a 100.000 habitantes, después de que el domingo se declarara un incendio en los bosques aledaños. Una acción que se desarrolla con dificultades debido a que algunas zonas han quedado rodeadas por el fuego, como la autopista que conecta la localidad con el sur de la provincia de Alberta.
Canada wildfire forces mass evacuation in Fort McMurrayhttps://t.co/AcogiAOIzb #ymmfire #StaySafe pic.twitter.com/4Ee1vpPl3v
— CECHR (@CECHR_UoD) 4 de mayo de 2016
“Es un desastre, no es justo, ni siquiera nos han dejado llevarnos las cosas. Lo hemos perdido todo. Solo nos queda lo que tenemos en los bolsillos”, lamentaba una ciudadana.
Comunidades cercanas a Fort McMurray, uno de los principales centros petrolíferos de Canadá, han abierto centros para recibir a miles de personas. Aunque el incendio no ha causado víctimas, diversas decenas de hogares han sido consumidos por las llamas.
“Ha sido el peor día de mi carrera. La gente se ha quedado sin nada, todo el mundo se ha visto afectado. La comunidad ha quedado devastada. Va a llevar tiempo para que la situación se restablezca”, expresaba Darby Allen Wood, del Departamento de Incendios de Buffalo.
Here's what you need to know if you are in the Fort McMurray area https://t.co/zbSJBL2h3g #cbcnn
cbchh</a> <a href="https://t.co/s3ousmSIkF">pic.twitter.com/s3ousmSIkF</a></p>— CBC Morning Show (CBCMorningShow) 4 de mayo de 2016
Las llamas se han visto alimentadas por las inusuales altas temperaturas de la región y los fuertes vientos en las últimas horas, lo que complica las tareas de evacuación de los servicios de rescate.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha asegurado que el Gobierno está listo para ayudar a los damnificados.