Seúl exigirá sanciones contra el desarrollo nuclear norcoreano

Corea del Sur ha desafiado a Corea del Norte por reafirmar su apuesta por las armas atómicas durante el primer congreso del partido único que celebra Pyongang en más de tres décadas.

Aunque Kim Jong-un lanzó un mensaje de conciliación a la comunidad internacional al asegurar que su país no será el primero en usar la bomba atómica, el líder norcoreano también dejó claro que no abandonará su política “Byeongjin” de desarrollo nuclear y económico adoptada en 2013.

El discurso del heredero de la dinastía Kim ha vuelto a encender las tensiones con Seúl:

“Nuestra postura, junto con la de la comunidad internacional, es consistente. No vamos a aceptar a Corea del Norte como un estado nuclear. El Gobierno redoblará sus esfuerzos para que Corea del Norte abandone su programa nuclear mediante la imposición de sanciones y otras medidas de presión “, ha señalado el ministro de Defensa surcoreano, Moon Sang-Ggyun.

Pyongang ha aprovechado el Congreso del Partido de los Trabajadores que se celebra estos días a puerta cerrada para alardear de su poderío nuclear.

Un congreso que llega después de meses de tensión, una prueba nuclear en enero pasado y varias pruebas de misiles de distinto alcance.

Por otra parte, las autoridades norcoreanas han expulsado este lunes a un periodista de la BBC, alegando que su cobertura sobre el evento estaba siendo “poco respetuosa”.