Las autoridades iraquíes han forzado la retirada de los centenares de manifestantes, la mayoría seguidores del clérigo chií Muqtada al Sadr, que este viernes ocuparon durante horas parte de la Zona Ve
Las autoridades iraquíes han forzado la retirada de los centenares de manifestantes, la mayoría seguidores del clérigo chií Muqtada al Sadr, que este viernes ocuparon durante horas parte de la Zona Verde de Bagdad, donde se encuentran las sedes del Parlamento y del Gobierno iraquíes y las embajadas occidentales.
“Estamos comprometidos con las órdenes de Muqtada al Sadr, es una protesta pacífica. Ha quedado claro quiénes estaban detrás de los atentados en Sadr City, Kadhimiya y Adil. El Gobierno iraquí ha demostrado que es el líder del terrorismo”, denuncia este joven.
Las fuerzas del orden han empleado gases lacrimógenos y chorros de agua para dispersar a los manifestantes, lo que ha causado lesiones y síntomas de asfixia a al menos 58 personas.
“El ataque a las instalaciones del gobierno y la propiedad pública registrado hoy no puede ser aceptado. Todos los autores de este ataque responderán ante la ley”, aseguraba el primer ministro iraquí Haidar al Abadi.
Esta es la segunda vez en un mes que manifestantes leales al poderoso clérigo chií irrumpen en la Zona Verde para exigir la formación de un Gobierno tecnócrata.