Protestas y disturbios a lo largo y ancho de Turquía.
PUBLICIDADProtestas y disturbios a lo largo y ancho de Turquía. Las calles de Estambul, Ankara o Diyarbakir, entre otras, han sido este viernes escenario de violentas manifestaciones en contra de la detención de Selahattin Demirtas y Figen Yüksekdag, líderes del partido prokurdo HDP. Tanto ellos como otros 10 diputados de este partido son investigados por supuestos vínculos con el PKK, la guerrilla kurda.
Para el Partido Democrático de los Pueblos, que con sus 59 escaños en el Parlamento es la tercera fuerza del país, las intenciones del Gobierno con estas detenciones están bien claras:
“Nos enfrentamos a otra fase del golpe que está llevando a cabo el palacio”, decía el abogado de Demirtas leyendo una carta de su cliente y refiriéndose con esta expresión al presidente Erdogan. “Mis colegas y yo continuaremos luchando contra este golpe ilegal, y queremos que la gente sepa que nos unimos a la lucha de nuestro pueblo por las libertades, la democracia y la paz”.
Las manifestaciones no han tenido lugar sólo en Turquía. En ciudades como París, Berlín o Frankfurt cientos de personas se han unido a las protestas por estas detenciones.
La preocupación y las condenas llegan también desde la esfera política. La embajada estadounidense en Turquía lamenta el bloqueo casi total que han sufrido en este país las redes sociales en las últimas horas y desde Alemania temen que Ankara esté dando con estas decisiones pasos hacia la ruptura con Europa y con la democracia.