PUBLICIDADLa crisis política, social y económica en Venezuela han hundido el bolívar. Cada dólar estadounidense se cambia por más de 13.000 bolívares, la cifra más alta jamás registrada, según de DolarToday.
Standard & Poor’s ha advertido de la posibilidad de que Venezuela incurra en un impago de deuda.
A ello hay que sumar la amenaza de Washington de imponer a Caracas posibles sanciones económicas, que afectarían al comercio petrolero. A pesar de que es poco probable que esto ocurra, la simple advertencia ya está teniendo efectos negativos en la maltrecha economía venezolana.
“Sólo empeoraría las cosas. Habría más hambre, más gente que no podría obtener medicamentos básicos… Sometería al país a más privaciones.Especialmente algunas de las cosas de las que está hablando el Gobierno, las sanciones contra las compañías petroleras representan el 95 de sus ingresos en exportaciones. Y si empiezas a quitarle eso, va a ser muy malo… Incluso la amenaza de esas sanciones, es algo que mucha gente no entiende, cuando la Administración Trump dice que lo va a hacer. Incluso si no lo hace, le cuesta al país miles de millones de dólares y perjudica enormemente a la economía, porque significa que cualquiera que esté pensando en prestar, invertir o incluso en créditos para las importaciones no va a obtenerlos, porque en cualquier momento, pueden llegar las sanciones y entonces cualquiera que esté invirtiendo o prestando dinero no lo recuperará”, explica Mark Weisbrot, codirector del Centro de Investigación en Economía y Política (CEPR) de Washington.
My piece on Trump administration’s threat of more sanctions that will make life more miserable for Venezuelans: https://t.co/PvCJbcjihn
— Mark Weisbrot (@MarkWeisbrot) 31 de julio de 2017
Sanciones individuales de EE UU entorpecen el refinanciamiento https://t.co/XCsvFSLwsxpic.twitter.com/Iaca6JdIGp
— El Nacional (@ElNacionalWeb) 3 de agosto de 2017
La miseria cotidiana
Venezuela ha pasado de la abundacia a la miseria más absoluta. Su inflación alcanzó el 176% en el primer semestre del año, y podría llegar hasta el 700% a finales de 2017, según el Fondo Monetario Internacional.
Los venezolanos pasan hambre, carecen de bienes de primera necesidad y de medicamentos. Los centros hospitalarios están colapsados y los venezolanos luchan a diario por su supervivencia.
Gráficos de
TheEconomist</a> sobre <a href="https://twitter.com/hashtag/Venezuela?src=hash">#Venezuela</a>:<br>- Caída importaciones<br>- Caída reservas internacionales<br>- Caída PIB<br>- Caída salario mínimo <a href="https://t.co/WV0awF5Fm4">pic.twitter.com/WV0awF5Fm4</a></p>— Mariano de Alba (marianodealba) 27 de julio de 2017