PUBLICIDADVladímir Putin ha supervisado los primeros ejercicios de las maniobras militares “Zapad-2017” que Rusia lleva conjuntamente con Bielorrusia hasta el 20 de septiembre en diversos enclaves de ambos países, algo que ha inquietado tanto a las naciones de la zona Polonia y los países bálticos como a la OTAN.
No obstante el alto mando ruso ha calificado estas operaciones de defensivas, y asegura que toman parte unos 12.700 efectivos, 70 aviones y helicópteros y diez barcos, aunque los aliados calculan que participan más de 100.000 personas.
“Hemos observado a los rusos y a los soviéticos antes hacer ejercicios militares similares. Están tratando claramente de mandar una señal para intimidar, pero creo que las medidas que ha tomado la OTAN, desplazar tropas a Polonia y a los países bálticos, el refuerzo de la posición militar de Estados Unidos en Europa. Creo que puede que quieran que sea intimidatorio, pero no lo es”, opinó Robert Gates, ex secretario de Defensa de Estados Unidos.
Pero los países vecinos no se fían, y es que maniobras similares dieron paso en 2008 a la invasión de la región separatista georgiana de Osetia del Sur y en 2014 a la anexión rusa de la península entonces ucraniana de Crimea.