Los tres países se han reunido en Astaná en su octava ronda de consultas sobre el alto el fuego en Siria
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Tras el fracaso de la última reunión de líderes mundiales en Ginebra, Rusia busca ahora relanzar su propuesta de un "congreso de diálogo nacional" para buscar una solución pactada al conflicto sirio. Después del octavo encuentro protagonizado en Astaná por Irán, Rusia y Turquía, los tres países comprometidos con el alto el fuego han acordado este viernes reunirse de nuevo los días veinte y treinta de enero en la ciudad rusa de Sochi.
Los representantes de los tres paises se han comprometido a cooperar en la realización de este congreso que buscará, dicen, la participación de toda la sociedad siria. Sin embargo, la lista de los participantes en el futuro encuentro no se ha hecho pública y tampoco se ha aclarado si se invitará al pueblo curdo, un participante que Ankara no vería con buenos ojos. Por su parte los representantes de la oposición en Astaná han afirmado que solo respaldarán el congreso si está vinculado al proceso negociador de Ginebra, que se celebrará el próximo enero.
También ha participado en esta ronda de consultas en enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, que ha reconocido cierto avance en las medidas de fortalecimiento de la confianza, así como en el desminado con fines humanitarios.