El regimiento de ingenieros número 68 de Ejército ruso ha organizado estas clases para padres e hijos
En la escuela de Yevpatoria, en Crimea, los niños adquieren habilidades poco comunes en pequeños de su edad. Como poner y desactivar minas terrestres. El regimiento de ingenieros número 68 de Ejército ruso ha organizado estas clases para niños
"Lo primero que queremos hacer atraer el interés de estudiantes de décimo y onceabo curso para que se alisten en los regimientos de ingenieros con un contrato más adelante", explica este subcomandante del 68º regimiento.
Cerca de 100 niños de menos de doce años han acudido este domingo junto a sus padres a un curso intensivo.
"Realmente me ha gustado mucho. Ha sido interesante. Hemos tirado un garfio y luego hemos tenido la oportunidad de desarmar bombas. Han mostrado como se hace a quienes aún no lo sabían. Los niños han podido también tratar de buscar minas usando un detectores. Todo en el curso ha sido interesante", comenta Dzhafar Idrisov, de sexto curso, alumno de la escuela.
Compañero de Dzhafar, Vladislav, de quinto curso, explica que siempre ha querido ser militar, y que montar y desmontar bombas le ha parecido muy interesante. De alguna forma, Vladislav se ha acercado así a su sueño. "Son conocimientos muy útiles en la vida. Nunca sabes lo que puedes esperar", añade Dmitry, que les acompaña.
"Creo que las clases son necesarias, porque los niños necesitan desarrollarse. Después de todo necesitan descubrir algo nuevo. Tienen que saber cómo defenderse. Deberíamos criar a los niños para ser patriotas", explica la directora del centro, Nadezhda Sysoyeva.
Los militares han dado también una conferencia sobre cómo construir artefactos caseros, como chalecos suicida o bombas camufladas.