No dan crédito a las informaciones. Desde la federación rusa de curling achacan a un "sabotaje" el positivo de Alexander Krushelnitsky, por dopaje, en Pyeongchang. Desde el Kremlin piden prudencia a la hora de tratar el caso
No dan crédito a las informaciones. Desde la federación rusa de curling achacan a un "sabotaje" el positivo de Alexander Krushelnitsky, por dopaje, en Pyeongchang. Desde el Kremlin piden prudencia a la hora de tratar el caso del deportista que ha competido bajo bandera neutral y sin himno nacional, debido a las sanciones que acarrea Rusia.
"Pedimos a todos que esperen a la publicación de los comunicados oficiales. El Comité Olímpico Internacional, COI, está actuando con precaución y con mucho tacto en esta situación. Esperemos al resultado de todas las pruebas. Creo que la muestra B se va a analizar en breve, así que vamos a esperar a su análisis y a futuras investigaciones que, inevitablemente, deberían producirse en esta situación", declara el portavoz de la Presidencia rusa, Dimitri Peskov.
En Rusia, los ciudadanos no salen de su asombro. Todos deseaban que el país dejase atrás, de una vez por todas, el monumental escándalo de dopaje en el que permanece sumido su deporte.
"Es horrible. ¿Qué mas se puede decir?", declara esta moscovita. "Supone una gran desgracia para Rusia. No sé qué debería decir. Es muy decepcionante y muy desagradable. Confiábamos en ellos a pesar de todo lo que pasó. Les aplaudimos. Les vitoreamos. Y ellos nos han fallado. Resulta muy doloroso", añade.
Hasta el momento, el equipo de deportistas olímpicos de Rusia acumula tres platas y ocho bronces en Pyeongchang.
