La decisión no ha sentado nada bien al gobierno israelí, que avisa de que habrá consecuencias.
PUBLICIDADParaguay ha desatado la ira de Israel al decidir que restablece su embajada en Tel Aviv, revocando el traslado de la legación a Jerusalén decidido por el anterior ejecutivo.
El ministro de Asuntos Exteriores paraguayo ha tratado de restar importancia a la medida: "No tendrían que molestarse nuestros amigos y hermanos de Israel. Hay más de 85 países que conservan su embajada en Tel Aviv. Nosotros somos un amigo y un aliado histórico de Israel. No hay que dejar de olvidar que el voto de Paraguay fue el voto decisivo para la creación del Estado de Israel", afirmó uis Alberto Castiglioni.
Sin embago, el primer ministro israelí ha respondido de inmediato en un tuit en el que anuncia el cierre de la embajada de Israel en Paraguay.
Según Benjamín Netanyahu, el país suramericano ha tomado una "decisión extraordinaria", "de extrema gravedad", que "empañará —dice— las relaciones bilaterales".
Fue el anterior presidente paraguayo, Horacio Cartes, quien en mayo, en los últimos extertores de su mandato y cuando Mario Abdo Benítez ya era presidente electo, decidió trasladar la embajada de Tel Aviv a Jerusalén.
De este modo, Paraguay se convirtió en el tercer país, tras Estados Unidos y Guatemala, en romper el consenso internacional, siguiendo la senda marcada por la administración Trump.
Ahora, la vuelta de la legación diplomática a Tel Aviv podría tener consecuencias.
Como dato curioso, Paraguay suministra el 40 % de la carne bovina consumida en Israel, con la supervisión de instituciones judías para garantizar que sea 'kosher'.