La reunión de Salzburgo terminó sin acuerdos y la premier pide a los líderes europeos que presenten otras ideas diferentes a su plan Chequers
PUBLICIDADLas conversaciones sobre el Brexit están "en punto muerto". Así lo ve la primera ministra británica Theresa May, que exige a la Unión Europea alternativas a su propuesta ante la actual falta de entendimiento. La cumbre de este jueves en Salzsburgo solo sirvió para evidenciar el rechazo de los líderes de la Unión al plan Chequers. Según lo socios europeos, es necesario que May ceda terreno respecto a los acuerdos comerciales y aduaneros referentes a la frontera del Reino Unido con Irlanda. La idea de la premier es la de mantener al Reino Unido en el mercado único de bienes, lo que significa una frontera abierta entre Irlanda y el Reino Unido.
"No es aceptable el rechazar la propuesta de la otra parte sin una explicación detallada o sin presentar otra propuesta a cambio", decía May tras la cumbre de Salzburgo. "Necesitamos que la Unión Europea nos diga cuáles son los verdaderos problemas y cuáles son sus alternativas, para así poder debatrilas. Y hasta que no hagamos esto, no podremos progresar. Mientras tanto, debemos prepararnos para la opción de un no acuerdo".
Reacciones dispares
Las reacciones a las palabras de May no se hicieron esperar. Donald Tusk quiso mostrarse más optimista que la premier, dejando claro que a su juicio el entendimiento sí es posible. El presidente del Consejo Europeo se presentó además como un íntimo amigo del Reino Unido y un gran admirador de May.
La primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon, no fue tan benevolente. A través de su cuenta de Twitter, Sturgeon calificó de "terribles" las palabras de May y advirtió que su partido pagaría un alto precio político si no se llegaba a un "acuerdo".
Para el líder de la oposición, Jeremy Corbyn, la solución es clara: "Si el gobierno no puede cumplir con sus negociaciones, no puede llevarlas a cabo a través del parlamento, por lo que creemos que es el momento de celebrar unas nuevas elecciones generales".
El próximo lunes, Theresa May celebrará con su gabinete una importante reunión que, de no concluir con un plan B para el Chequers, podría derivar en la dimisión de algunos de sus ministros. El Brexit sigue sin encontrar una salida.