La técnica propuesta por este peluquero madrileño incluye espadas, garras y fuego.
PUBLICIDADSi creen que lo han visto todo... se equivocan. La forma de cortar el pelo que propone el peluquero madrileño Alberto Olmedo es un tanto diferente a la que estamos acostumbrados, aunque su esencia tiene referentes en el pasado.
Un buen día, Olmedo se dio cuenta de que cortar con las tijeras no le hacía ninguna ilusión. Con ellas no se podía lograr el corte perfecto que buscaba. Así que, aficionado por el Renacimiento, comenzó a estudiar sus pinturas y pensó: ¿cómo lograban las mujeres cortarse el pelo de esa forma tan bonita sin tijeras?
Tras mucho investigar, descubrió que los barberos tradicionales también pensaban un poco como él y empleaban puñales. Así que ahora, entre los lacas y los secadores hay espadas, garras de metal y fuego.
Para ponerse en las manos de este Manostijeras de la peluquería, no solo necesita tener pelo.
También coraje.