Un año después del caso Aquarius, los puertos europeos siguen cerrados y centenares de migrantes muriendo en el Mediterráneo. Médicos Sin Fronteras denuncia que las ONG son el chivo expiatorio del fracaso de la Unión Europea ante el problema migratorio.
PUBLICIDAD¿Qué piensa hacer la Unión Europea (UE) para resolver la emergencia humanitaria en el Mediterráneo?
Los puertos de la UE siguen cerrados un año después de la crisis del Aquarius. En junio de 2018, el barco de rescate de la ONG SOS Méditerranée pasó diez días en un limbo, después de que Italia y Malta le cerraran sus puertos. A bordo, 600 migrantes, que finalmente pudieron desembarcar en España.
Hoy por hoy, las ONG que operan en el Mediterráneo podrían enfrentarse a cargos criminales por parte de los Gobiernos de la UE.
Médicos Sin Fronteras (MSF) denuncia que son el chivo expiatorio del fracaso de la Unión para solucionar el problema de la migración.
"La operación de lucha contra la trata de seres humanos en la UE no ha dado los resultados que buscaban. No ha disminuido el número de personas que intentan cruzar el mar, por lo que han tenido que encontrar a quien culpar y, obviamente, las ONG ahora están soportando la carga de este problema", asegura Aurélie Ponthieu, de MSF.
Crisis estancada
En junio del año pasado, los Gobiernos de la UE anunciaron su intención de reformar el sistema de cuotas para reubicar a los solicitantes de asilo entre los Estados miembros. También planearon crear puntos de acceso fuera de Europa para preseleccionar las solicitudes de asilo. Otra solución que se planteó fue abrir centros de recepción en países europeos para aliviar a los países del sur, que se enfrentan a la mayor afluencia de migrantes.
Pero no se logró un acuerdo sobre dichas reformas. El resultado fue que los países europeos discutían cada vez que otro barco llegaba a sus aguas. La Comisión Europea (CE) quedó atrapada en el medio.
"En realidad vamos a reincidir. Vamos hacia atrás en la cooperación europea. Estamos permitiendo una solidaridad desigual en la UE. A lo que debemos apuntar es a una solidaridad igual. Todos los Estados miembros involucrados y comprometidos con una responsabilidad, que al final del día pertenece a todos los miembros de Schengen", señala Sergio Carrera, del Centro de Estudios de Política Europea (CEPS).
Más de 1.000 muertos en un año
Desde junio de 2018, más de mil personas han muerto en el Mediterráneo.
Pese a que ha disminuido el número de inmigrantes que han llegado al Viejo Continente, en las últimas elecciones europeas el problema de la migración llevó a un aumento de los apoyos a los partidos nacionalistas, sobre todo en Italia.
"No podemos permitir, como ha hecho el Gobierno italiano en los últimos años, recibir 700.000 clandestinos, que debían ser distribuidos en los otros Estados miembros, porque no funciona, porque los otros países europeos dicen 'No'", afirma Mara Bizzotto, eurodiputada de la Liga .
La crisis migratoria está en la agenda de la cumbre europea de este jueves y viernes en Bruselas. Los líderes europeos también deben ponerse de acuerdo sobre quién ocupará los principales puestos de las instituciones comunitarias, que deberán proponer nuevas soluciones al problema migratorio.