Crisis de Gobierno en Italia. El ministro de Interior y viceprimer ministro ha puesto fin a la alianza con la formación de Luigi di Maio tras meses de desencuentros. El líder de la formación antisistema asegura no tener miedo a nuevos comicios a pesar de las encuestas en contra.
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Matteo Salvini da por rota la coalición con el Movimiento Cinco Estrellas y exige la convocatoria de nuevas elecciones.
"Devolvamos la palabra a los electores", ha pedido el viceprimer ministro y el líder de la ultraderechista La Liga al primer ministro Giuseppe Conte.
La formación antisistema ha respondido inmediatamente al órdago, asegurando no tener miedo a nuevos comicios. Pero aspira a que antes de celebrarlos el Parlamento apruebe una de sus medidas estrella: la reducción de escaños en esta cámara y en el Senado. "No nos preocupa en absoluto ocupar puestos en el Gobierno, ha dicho Luigi di Maio, cabeza del partido. "Cuando tomas el pelo al país, antes o después lo pagas", ha advertido a Salvini.
Según una reciente encuesta, en caso de elecciones La Liga sería el más votado y le bastarian los también conservadores Hermanos de Italia y Forza Italia, para formar ejecutivo.
La gota que ha colmado el vaso en esta extraña alianza tras meses de desencuentros fue la votación de este miércoles sobre la construcción de una línea de alta velocidad entre Turín y Lyon. Cinco estrellas lo hizo en contra en contra y la Liga a favor.
Existen otros escenarios posibles además del adelanto electoral.
Conte podría buscar otros apoyos parlamentarios, o el presidente Sergio Mattarella encargar la formación de una nueva mayoría al Movimiento cinco estrellas y al partido democrático.
Pero de convocarse comicios, por una cuestión de plazos, estos no tendrían lugar antes del próximo octubre.