Lunes por la tarde en el puerto de la isla griega de Lesbos. Sale el barco de pasajeros "Aqua Blue'. A bordo, un total de 781 solicitantes de asilo, en su mayoría familias, que inician su viaje desde el superpoblado campamento de Moria hacia unas instalaciones en el norte de Grecia
PUBLICIDADLunes por la tarde en el puerto de la isla griega de Lesbos. Sale el barco de pasajeros "Aqua Blue'. A bordo, un total de 781 solicitantes de asilo, en su mayoría familias, que inician su viaje desde el superpoblado campamento de Moria hacia unas instalaciones en el norte de Grecia.
Al mismo tiempo, otro barco de pasajeros griego llamado "Kaldera Vista" llega al puerto de Tesalónica, la segunda ciudad griega más grande, a unos 500 km al norte de la capital, Atenas. Ya ha trasladado a 635 migrantes y refugiados, que partieron antes por la mañana desde Lesbos.
Según un anuncio oficial del Ministerio de Protección Ciudadana, desde el puerto de Salónica, los casi 1500 solicitantes de asilo serán trasladados a emplazamientos en el norte de Grecia.
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No es la primera vez que las autoridades griegas e enfrentan a un problema como este. Konstantinos Flouris, jefe de puerto de Mitilene, explica la difícil situación de los funcionarios: "Los funcionarios de la Autoridad Portuaria de Mytilene han estado gestionando la cuestión de la migración desde 2015. Es muy difícil manejar esto porque se trata de dolor humano, de almas humanas. Cada día patrullamos el mar intentando vigilar las fronteras marítimas comunes no solo de Grecia, sino también de la UE. Al mismo tiempo, estamos tratando de ayudar a cualquiera que se encuentre en el mar y esté en peligro".
Más de 11.000 migrantes se refugian en Moria, el mayor campamento de Europa, que ha sido criticado por las organizaciones humanitarias por sus miserables condiciones de vida.
Esta es la mayor transferencia al continente en los últimos cuatro años. Para las autoridades griegas es una solución de urgencia, ya que la semana pasada se informó de un aumento de las llegadas de la costa turca.