El español Nikoloz Sherazadishvili volvió a lo más alto del podio al proclamarse campeón de la categoría de -90 kilos del Gran Slam de Brasilia.
Teddy Riner fue el centro de todas las miradas durante la última jornada del Gran Slam de Brasilia.
En el primer combate el francés se las vio con el japonés Kokoro Kageura al que superó con un gran ashi guruma. Después venció al ruso Inal Tasoev en un combate ajustado por waza ari. Y en la semifinal se deshizo del campeón del mundo Lukas Krpalek. Un día difícil para Riner.
En la final la historia no pudo haber sido más diferente. El judoca francés se acabaría sentando en el trono de la categoría de los pesos pesados tras derrotar al brasileño David Moura con un fantástico osoto maki komi al principio del combate.
Le entregó la medalla la responsable de competición de la Federación Internacional de Judo Lisa Allan.
En la categoría femenina de +78 kilos, las brasileñas Maria Suelen Altheman y Beatriz Souza se encontraron en la final.
Con un inteligente ashi waza Souza se acabó haciendo con el escalón más alto del podio y convirtiéndose en en nuestra mujer del día.
Las medallas fueron entregadas por el maestro y noveno dan Takeshi Miura.
En la categoría de -90 kilos el español y número uno del mundo Nikoloz Sherazadishvili derrotó en la final al cubano Ivan Felipe Silva Morales.
El campeón del mundo de 2018 se impuso por waza ari después de realizar un uchi mata marca de la casa.
Segundo oro para el español en un gran slam que tras una gran actuación regresaba a lo más alto del podio en un evento del circuito mundial de judo.
Kaliema Antomarchi se colgó su primera medalla de oro en un gran slam en la categoría de -78 kilos. Tras un espectacular ura nage, la cubana se hizo con una merecida victoria sobre la británica Natalie Powell.
El japonés Kentaro Iida sobresalió durante la tercera jornada. En la final de -100 kilos se enfrentó al judoca local Rafael Buzacarini y coronó un gran día con un brillante sode tsuri komi goshi.
Nuestro movimiento del día fue un épico harai goshi del ruso Kirill Denisov que además le valió colgarse la medalla de bronce.