EEUU arría su bandera y abandona el consulado de Chengdu

Es el último capítulo de la "guerra de los consulados". Estados Unidos ha arriado su bandera y ha abandonado la legación diplomática de Chengdu, en el suroeste de China, con la ayuda de grandes camiones de mudanzas horas antes de que se cumpliera la fecha límite dada por el Gobierno chino. Cientos de personas se ha acercado al edificio para hacerle fotos y grabarlo con sus teléfonos móviles en un momento histórico en la escalada de la tensión entre Pekín y Washington.

El pasado viernes se vivió una escena similar en Houston, en el sureño estado estadounidense de Texas. La Administración Trump ordenó el cierre del consulado chino tras detener a tres investigadores de esa nacionalidad por presunto espionaje y fraude en la solicitud de visados. Una cuarta investigadora fue arrestada más tarde en San Francisco por los mismos motivos. 

Las relaciones entre ambas superpotencias se deterioraron notablemente tras la llegada de Trump a la Casa Blanca, que inició una guerra comercial que parecía haber concluido el pasado mes de enero con la firma de un acuerdo por fases con el objetivo de equilibrar poco a poco la balanza comercial entre ambos países, muy favorable a China. Sin embargo, el estallido de la crisis desatada por el coronavirus ha levantado muchas suspicacias y ha acentuado de las diferencias entre ambos colosos económicos.